Día para recordar, pero no por lo bueno, ya dicen por ahí en el mundo de las motos, que la concentración de los Pingüinos nació para saciar las necesidades de algunos de pasar calamidades en moto, desde Velada a la churrería de la Cruz Roja, ya he tenido más que tiempo para ver como la niebla se adhería a la pantalla de mi casco, es verdad que hay cascos que no se empañan, será por el famoso pink look de Shoei o Arai, etc. El problema son los 400 aurelios en adelante que suelen valer, también es verdad que nada comparado con lo que vale la montura, en fin que no se si hoy hubiera valido de algo, porque a las 10:30 am. Entre Alcaudete y Belvis no se veía un pimiento, en mi caso, no sé el de los otros diez que venían, he pasado un par de curvas por la izquierda del eje de la carretera, una de las veces he frenado sobre la línea blanca, una odisea, y he pensado eso de que a la tercera va la vencida, entre que lo previsto era subir hasta Sevilleja y que cuanto más subíamos menos se veía, en Belvis me he parado y he vuelto al punto de partida.
En torno a las 13 horas nos hemos vuelto a encontrar, el grupo ya en Talavera, que también habían parado un par de kilómetros mas arriba, con una paradita larga y dejando que la niebla levantara han vuelto con alguna que otra anécdota que contar, esta vez no hay fotos, no porque no se viera sino por que no nos la hemos ganado.
Realmente hoy creo que me ha pesado más la sensasatez que el mono de moto que tenia, pero el próximo domingo lo volveremos a intentar.
(La foto es de archivo, y no de hoy, es por ilustrar el relato, jajajajaja...)
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